Dispositivo para detectar las huellas de la actividad paranormal utilizando varios sensores que miden los campos electromagnéticos, vibraciones y sonidos. Lo cual los hace sensibles al rastro dejado por la presencia de seres como los fantasmas o espíritus. Sin embargo, los equipos paranormales tradicionales pueden ser fácilmente engañados por simples ráfagas mundanas de la actividad normal que producen campos electromagnéticos, vibraciones y sonidos. El ghost radar emplea un algoritmo para analizar el flujo cuántico filtrando los campos magnéticos en las frecuencias constantes como los generados por artefactos eléctricos, por ejemplo: TV, routers, ordenadores, cargadores, teléfonos móviles, etc. Se distingue por el análisis de las lecturas de los sensores y por dar indicaciones sólo cuando los patrones interesantes en las lecturas se han hecho. Esta herramienta no detecta EMF ni la gravedad.
Lecturas para varios sensores son analizadas para detectar las fluctuaciones cuánticas. Las interpretaciones de las lecturas del sensor se muestran gráficamente como muescas en el radar, junto con lecturas numéricas y de texto de la VOX. Los cazadores de todo tipo pueden encontrar áreas anormales de su entorno en el que una mera lectura no puede ser significativa si no va seguida de un análisis contextual riguroso.
En teoría, puede suceder que la energía inteligente puede ser consciente de su capacidad para influir en los sensores del dispositivo. Las lecturas diversas son una interpretación de ciertas lecturas de los sensores. Un ser energético e inteligente debería ser capaz de influir en las lecturas y comunicarse mediante el dispositivo.
El rango de detección varía entre 0 y 30 metros aproximadamente, en función del dispositivo utilizado. Actualmente, se ha equipado a los móviles de la Pararnomal Agent con un sofware de detección de campos electromagnéticos alterados.
